¿Tiene usted preguntas acerca de las cosas espirituales? ¿Dónde busca las respuestas? ¿En las "ciencias ocultas"? ¿En la ciencia? ¿O en Dios? Lea los siguientes versos:
Daniel 2:1-2
"En el segundo año del reinado de Nabucodonosor, tuvo Nabucodonosor sueños, y se perturbó su espíritu, y se le fue el sueño. Hizo llamar el rey a magos, astrólogos, encantadores y caldeos, para que le explicasen sus sueños. Vinieron, pues, y se presentaron delante del rey"
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La traducción de Reina Valera para estos versos es exacta y muy buena. La definición de las "profesiones" de los "asesores presidenciales" de Nabucodonosor la dejamos para una nota final, porque las palabras mismas usadas en la traducción definen muy bien la ocupación de ellos, y probablemente todos las comprenderemos.
Antes de introducirnos en la materia es importante definir de qué se habla. Durante siglos ha existido un enfrentamiento desastroso entre "religión" y "ciencia" que no ha favorecido en nada a ninguno de los dos bandos y ha sido un instrumento muy útil para Satanás en su labor de desviar a las personas de la verdad.
Las preguntas iniciales se refieren a "Dios" como el Creador del universo y sus leyes; como creador que es, hizo la materia y le puso formas de existencia y transformación, conocidas por todos como "leyes naturales". En esta definición están de acuerdo prácticamente todas las personas, tanto las que creen como las que no creen en Dios.
En la actualidad hay una bastante bien delimitada frontera entre "ciencias" y "ciencias ocultas". Pero para muchos esto "no es negocio", principalmente para dos grupos de personas (ambos enemigos de Dios). Los que practican "ciencias ocultas", por un lado, tienen gran interés en que su "ciencia" sea creída, por lo cual usan argumentos "científicos" que prueban que sus afirmaciones son verdad. Y los científicos ateos, por otro lado, están decididos a demostrar que Dios no existe y la ciencia en sí es capaz de explicarlo todo. Entonces convierten la "ciencia" - el conocimiento acerca de lo que Dios creó, y que es posible de explorar mediante la observación y experimentación - en "ideología" - la declaración de "principios" ateos que no son en modo alguno resultado de sus experimentos y observaciones, sino que son argumentos para sostener el ateísmo y apartar a las personas del conocimiento de Dios. Este uso ilegítimo de la ciencia y el conocimiento científico ha creado un fuerte rechazo en muchas personas religiosas hacia la ciencia verdadera, y ha aumentado la división entre "revelación de Dios" y "conocimiento científico", que no tendría que existir. El verdadero "conocimiento científico" es un producto de la sabiduría humana - que Dios nos dio - y es tan verdadero como la revelación de Dios. Tan cierto es que Dios envió a Su Hijo Jesucristo a salvarnos, como que si se calienta el agua hasta los 100 grados comienza a hervir y a convertirse en vapor. De hecho, para el estudio de la Biblia se han usado varias "ciencias" como Arqueología y Lingüística, que no tienen nada de "religiosas", y no obstante confirman la revelación bíblica mediante pruebas "científicas".
Pero volviendo a Babilonia y al rey Nabucodonosor, sus "asesores" presidenciales no eran profetas ni científicos, sino "pseudo-científicos". Las descripciones que tenemos de ellos son en principio dos:
1) "magos" (o hechiceros, o adivinos; no confundir con los "magos" que vemos en los circos o la TV ejecutando trucos visuales; aquí se refiere a los "magos" como a los "hechiceros" de las tribus o los tipo "Merlín" o "Saruman" en el concepto moderno, también llamados "brujos").
2) "astrólogos" (o "caldeos"; siendo que en Babilonia la astrología era muy practicada, "caldeo" llegó a ser sinónimo de "astrólogo"). Este es un buen ejemplo de mezcla de ciencia verdadera (astronomía) con "ciencia oculta" (astrología). La astronomía ha hecho posible viajar a la Luna (lo cual sería imposible sin conocer las órbitas de los planetas y satélites y otros muchos "hechos científicos") pero la astrología engaña a las personas afirmando que hay ciertos "destinos" atados a los movimientos de los astros (mentira satánica que aparta a las personas de Dios).
Los sueños son usados por Dios en la Biblia para revelarse a las personas en muchas ocasiones, y la interpretación de este sueño que inquietó a Nabucodonosor es una de las profecías más impresionantes, que muestra los imperios que se sucederían a lo largo de la historia. Pero no hay que ver en TODOS los sueños una "revelación de Dios". Dios se revela en las escrituras, pero no a través de TODAS las escrituras, se revela a través de ángeles, pero no TODOS los ángeles, y se revela a través de los profetas, pero no TODOS los profetas. Hay escrituras antibíblicas, demonios que se hacen pasar por ángeles buenos, y falsos profetas que hablan mentira pero se presentan como portavoces de Dios. También hay "sueños" en los cuales Dios revela acontecimientos, y "pesadillas" que no debieran preocuparnos si confiamos en que tenemos un Padre que nos guarda. Es posible que usted haya soñado que se está muriendo en tres o cuatro maneras distintas. Esto es prueba de que varias - o quizás todas - son mentira (todos nos vamos a morir físicamente, pero una vez y de una manera).
En todo caso, los sueños pueden impresionarnos y desvelarnos, como le sucedió a Nabucodonosor. Mi experiencia personal con los sueños no es muy extensa, porque no sueño a menudo; las visiones que han llegado a mí en oración las he confrontado siempre con la Palabra de Dios y he recibido confirmación del Señor de que son de Él - y más adelante las compartiremos, si el Señor lo permite. "Sueños" y "visiones" aparecen juntos a menudo como formas de relevación a lo largo de la Escritura, referidas a las imágenes que aparecen en nuestra mente, ya sea dormidos o en algún estado de éxtasis.
Si su respuesta a las preguntas iniciales es "Dios", este capítulo de Daniel le va a llenar de gozo - como a mí - porque nos demuestra que nuestro Padre sabe todo lo que ha sucedido, lo que sucede y lo que será en el futuro, y que nuestra sociedad imperfecta, llena de vicios, pecados y maldad dará paso al Reino de Dios en la eternidad. Si hasta ahora ha sido ateo - por lo tanto ha desechado a Jesucristo y la Biblia como algo santo, legítimo, divino y real - o ha creído en lo espiritual y sobrenatural, pero ha buscado sus respuestas en alguna "ciencia oculta", déjeme decirle que Dios le ama y le quiere librar de la muerte eterna, que no es "aniquilación" como algunos creen, sino tormento eterno. Para salvarnos del tormento eterno y llevarnos a la vida eterna Dios envió a Su Hijo Jesucristo a morir por nuestros pecados en una cruz. Reciba a Cristo como su Señor y Salvador, confiésele sus pecados y reciba su perdón. No importa cuán apartado de Dios haya vivido hasta ahora; no importa cuantos hechiceros, astrólogos, cartománticos, espiritistas u otros haya consultado hasta ahora; Dios ha prometido perdonar sus pecados y Él no falla nunca a Sus promesas. Conozca a Jesucristo y sea salvo!
Que el Señor le bendiga. En el amor de Cristo, su hermano
Israel Leonard
PS. ¡Cristo viene pronto!
NOTA: "Profesiones" de origen satánico; lo que la Biblia enseña acerca de ellas:
En Daniel 2 aparecen los magos, encantadores o adivinos, del hebreo "khartóm", "kashaf" y "gezár", respectivamente. Las tres palabras son casi sinónimas y por tanto se hallan traducidas de formas diferentes en diferentes versiones de la Biblia. Aluden a los hechiceros, que dicen tener conocimientos de lo sobrenatural y tienen como profesión "revelarlo" a los demás. Sus "conocimientos" y "revelaciones" son satánicos, como lo enseña la Biblia, y eran condenados por la Ley de Moisés (Dt 18:10-11 *), que prescribía pena de muerte a los que los practicasen (Ex 22:18; Lv 20:27) así como la de las personas que los consultaran (Lv 20:6). En la misma categoría estaban los que adoraran a otros "dioses" (p. ej. los sacrificios de bebés a Moloc, Lv 20:1-5). El mismo rey Saúl (primer rey de Israel, la máxima autoridad de la nación) fue rechazado y abandonado por Dios, que puso en su lugar al rey David. Uno de los pecados que se mencionan como la "rebelión" de Saúl fue ir a consultar una espiritista, con "espíritu de adivinación" (1 S 28:7; 1 Cr 10:13-14) en lugar de consultar a Dios.
Otra clase de adivinos en Dn 2 es la representada por los astrólogos o "caldeos" (heb. "asháf" y "kasdí", repectivamente), que basaban sus "predicciones" en la posición de los astros. También son desacreditados por la Palabra de Dios (Dn 2:27) y su "conocimiento" tenido como ajeno al de Él.
En el NT los primeros cristianos se enfrentaron también con hechiceros y magos. Hch 8:9-21 muestra un mago que fue rechazado y reprendido por el apóstol Pedro porque queria "comprar" el poder del Espíritu Santo. En Hch 13:4-12 se relata la historia de otro mago que fue castigado con ceguera por una profecía del apóstol Pablo, a quien estorbaba mientras evangelizaba a un funcionario romano. Y Hch 16:16-18 muestra a una joven esclava que tenía "espíritu de adivinación" y fue librada del mismo por el apóstol Pablo. Todos los ejemplos muestran que la hechicería, adivinación, magia y ciencia oculta en general siguió siendo tan abominable para Dios en el NT como lo era en el AT. Obsérvese que la frase "espíritu de adivinación" implica que la joven esclava de Hch 16 estaba poseída por un demonio (así como la hechicera que consultó el rey Saúl, y en general todos los hechiceros y magos), y fue librada por el apóstol. La capacidad sobrenatural para obrar en el mundo espiritual, por medios diferentes a los de Dios, es siempre una capacidad satánica, que el diablo le da a "sus siervos" para que contrarresten la obra de Dios a través de los "siervos de Dios". El plan de Dios es salvar a las personas; el del maligno, llevarlas al infierno.
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* Uno de los pasajes en que se prohíben todas las formas de ocultismo en Israel es Deuteronomio 18:10-11, "No sea hallado en ti quien haga pasar a su hijo o a su hija por el fuego, ni quien practique adivinación, ni agorero, ni sortílego, ni hechicero, ni encantador, ni adivino, ni mago, ni quien consulte a los muertos"
1) El pasaje se refiere en el comienzo a los sacrificios humanos que se presentaban ante otros "dioses", "pasando los hijos por fuego"; esto era la forma de sacrificio presentada a Moloc (Lv 18:21), al cual se le ofrecían bebés para ser consumidos por las llamas mientras los "sacerdotes" de Moloc hacían un gran estruendo que sofocaba los gritos de dolor de los bebés. Estas bárbaras costumbres son la causa de que Dios destinara a exterminio a los cananeos para dar esta tierra a Israel (Dt 9:4). Además se prohíben:
2) los espiritistas o nigromantes, traducido en Reina Valera como "adivinos" y "los que consultan a los muertos", del hebreo "soél ob" y "dorés el hametím" que significan literalmente "los que preguntan a los espíritus" y "a los muertos", respectivamente.
3) varios tipos de hechiceros, magos o adivinos:
- heb. "qosém qesamím", el que practique adivinación, (o brujería; ej. en palabras de Balaam; Nm 23:23) en cuanto su "adivinación" usa "sortilegios", ver pto sgte = brujería)
- heb "meonemín" "agorero" (literalmente "que lee las nubes") Otros tipos de adivinación en Ez 21:21 incluyen la observación de los hígados de animales, "sacudir" saetas de adivinación (las saetas eran arrojadas para escoger la que quedara en la parte superior) o consultar otros "dioses" (ídolos => demonios).
- heb "nakhásh" sortílego, adivinador (lit. "que pronostica")
- heb "kasháf" hechicero
- heb "khobér kháber" encantador, (lit. "que echa encantamientos")
- heb "yideoní" mago, (lit. "conjurador de espíritus")
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